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Textiles piden paliativos para cumplir con ajuste de salario
Fundamentación. Gremial la presentó ayer ante la Dirección de Trabajo
ANDRÉS OYHENARD
Los textiles están dispuestos a rever su posición sobre no otorgar los aumentos de salarios en julio si el gobierno aprueba una serie de medidas que contemplen la crisis que atraviesa el sector. Ya presentaron la fundamentación para el "descuelgue".
La patronal de la industria textil presentó ayer por escrito ante la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) la fundamentación para solicitar el "descuelgue" de los Consejos de Salarios para no dar los aumentos de sueldos de julio.
Ahora los Ministerios de Economía y de Trabajo analizarán si aprueban o no el planteo de las empresas textiles. En el caso de aprobarlo, las partes volverán a discutir los puntos para una nueva pauta de ajuste salarial. En tanto se abrió un cuarto intermedio de diez días entre las tres partes.
El presidente de la Asociación de Industrias Textiles del Uruguay (AITU), Norberto Cibils, dijo a El País que se apuesta al diálogo y a la "sensibilidad" del Poder Ejecutivo para encontrar una solución. El empresario señaló que si se aprueban medidas que mejoren la competitividad se podría cumplir con el aumento de julio.
En el documento de cuatro páginas que presentó la industria textil ante la Dinatra, al que tuvo acceso El País, los empresarios dicen que no se justifica un aumento de los sueldos porque "no se tiene en cuenta la situación de crisis que continúa padeciendo la industria textil en su conjunto y que es contradictoria con las medidas que se han instrumentado en otros ámbitos gubernamentales para paliar los efectos de dicha crisis".
Para los industriales, la crisis global redujo el financiamiento a consumidores y empresas, bajó el consumo y nivel de actividad se produjeron despedidos y quiebras de empresas en países desarrollados. Esto llevó a una "notoria" disminución del comercio internacional que trajo aparejado una baja de precios y productos que tuvieron directa repercusión en las empresas locales.
Según datos de la Asociación de Industrias Textiles -que aglomera a 24 empresas- en octubre de 2008 el sector empleaba a 3.252 personas mientras que en junio de este año tenía ocupados a 2.584 empleados, lo que representó la perdida de 668 puestos de trabajo. En los últimos ocho meses, el sector envió al 20,54% de su personal al seguro de paro.
En la carta que presentaron los textiles se aclara que estos datos no representan a todas las industrias, ya que muchas no están asociadas a la gremial y otras no contestaron la encuesta que hizo el sector.
CRÍTICAS. En otro de los puntos del documento, la patronal también se queja del "encarecimiento" en los costos de producción, la pérdida de competitividad de las empresas, como "consecuencia" de políticas o acciones gubernamentales relativas a las contribuciones de seguridad social, devolución de impuestos, tasas de interés, cotización del dólar, aranceles y crecimiento desigual de salarios (...) que han "influido en la profundización de la crisis.
Cibils dijo que los planteos que hicieron los industriales son "los mismos" que se han hecho en la mesa textil desde febrero.
"Nosotros hicimos este planteo (el de descolgarse de los ajustes de salarios) para ser coherentes con los reclamos que ya le hemos hecho" al Poder Ejecutivo, indicó Cibils.
El presidente de AITU reiteró que la crisis llevó a un "agravamiento" de la coyuntura complicada que ya venía atravesando el sector.
"Lo último que tenemos del gobierno es que en la primera quincena de julio se iban a dar medidas para el sector de tejido, pero aún no hemos recibido ninguna notificación", reclamó el empresario.
Cibils agregó que "a nadie la gusta sacrificar por el lado del salario, pero que resulta incongruente aceptar un aumento de salario que fue votado en contra en noviembre" cuando se aprobó el convenio de ajuste de los empleados textiles.
No obstante, el presidente de AITU dijo que su gremial está dispuesta a rever su "posición" sobre el descuelgue de los Consejos de Salarios si el Poder Ejecutivo "aplica" una serie de paliativos que puedan ayudar a mejorar la competitividad del sector.
TRABAJADORES. El integrante del Secretariado Ejecutivo del Pit-Cnt, Milton Castellano -que ayer acompañó al Congreso Obrero Textil (COT) en la reunión en la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra)- dijo a El País que la industria textil viene acarreando problemas de competitividad desde hace mucho tiempo "que se mezclan" con los efectos de la crisis.
Según lo acordado en la Dinatra ayer, se estableció un cuarto intermedio de diez días para buscar compromisos globales que permitan mantener los puestos de trabajo y los salarios.
"La idea es tener algún contacto con el Gabinete Productivo para plantear las dificultades que tiene la industria y si se pueden encontrar medidas que ayuden al sector", dijo el dirigente sindical.
El integrante del Pit-Cnt señaló que hay que ver si se pueden "encarar" las dificultades desde un punto de vista "global" y que "no es una solución pedir el descuelgue de la pauta salarial para no dar el ajuste de julio". "Si no dar el aumento de julio haría que no se siga enviando más personal al seguro de paro y que se puedan tomar a los trabajadores que hoy no están trabajando, estaríamos de acuerdo, pero esa no es la realidad del sector", sostuvo.
El sindicalista destacó que no se trata de un ajuste "tremendo" sino que apenas llega al 4% y que esto para la industria no representa mucho en sus costos porque la incidencia de los salarios es "muy baja".
Por otro lado, Castellano anunció que se espera que hoy el gobierno fije una fecha para la reunión tripartida del Gabinete Productivo que podría ser la próxima semana.
La Cámara de Industrias había declarado que insistirá con medidas de tipo "global" que atiendan a todos los sectores para evitar que más ramas de actividad sigan cayendo por los efectos de la crisis.
Ventas al exterior caen 31%
Las exportaciones de lana, hilados y tejidos en el último año móvil cerrado a junio cayeron 31,4%, según datos del Instituto Uruguay XXI. Junto con las pieles y cueros que disminuyeron un 39,9%, los textiles son uno de los sectores más afectados en el comercio internacional. La crisis global frenó las exportaciones de estos productos a México y Estados Unidos que eran los principales destinos. Los industriales textiles locales también hacen hincapié en que la caída de los pedidos en los mercados internacionales se ha visto agravada por los subsidios a la producción industrial que han impulsado países como China y Portugal.
El País Digital
03/07/2009
Los textiles están dispuestos a rever su posición sobre no otorgar los aumentos de salarios en julio si el gobierno aprueba una serie de medidas que contemplen la crisis que atraviesa el sector. Ya presentaron la fundamentación para el "descuelgue".
La patronal de la industria textil presentó ayer por escrito ante la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) la fundamentación para solicitar el "descuelgue" de los Consejos de Salarios para no dar los aumentos de sueldos de julio.
Ahora los Ministerios de Economía y de Trabajo analizarán si aprueban o no el planteo de las empresas textiles. En el caso de aprobarlo, las partes volverán a discutir los puntos para una nueva pauta de ajuste salarial. En tanto se abrió un cuarto intermedio de diez días entre las tres partes.
El presidente de la Asociación de Industrias Textiles del Uruguay (AITU), Norberto Cibils, dijo a El País que se apuesta al diálogo y a la "sensibilidad" del Poder Ejecutivo para encontrar una solución. El empresario señaló que si se aprueban medidas que mejoren la competitividad se podría cumplir con el aumento de julio.
En el documento de cuatro páginas que presentó la industria textil ante la Dinatra, al que tuvo acceso El País, los empresarios dicen que no se justifica un aumento de los sueldos porque "no se tiene en cuenta la situación de crisis que continúa padeciendo la industria textil en su conjunto y que es contradictoria con las medidas que se han instrumentado en otros ámbitos gubernamentales para paliar los efectos de dicha crisis".
Para los industriales, la crisis global redujo el financiamiento a consumidores y empresas, bajó el consumo y nivel de actividad se produjeron despedidos y quiebras de empresas en países desarrollados. Esto llevó a una "notoria" disminución del comercio internacional que trajo aparejado una baja de precios y productos que tuvieron directa repercusión en las empresas locales.
Según datos de la Asociación de Industrias Textiles -que aglomera a 24 empresas- en octubre de 2008 el sector empleaba a 3.252 personas mientras que en junio de este año tenía ocupados a 2.584 empleados, lo que representó la perdida de 668 puestos de trabajo. En los últimos ocho meses, el sector envió al 20,54% de su personal al seguro de paro.
En la carta que presentaron los textiles se aclara que estos datos no representan a todas las industrias, ya que muchas no están asociadas a la gremial y otras no contestaron la encuesta que hizo el sector.
CRÍTICAS. En otro de los puntos del documento, la patronal también se queja del "encarecimiento" en los costos de producción, la pérdida de competitividad de las empresas, como "consecuencia" de políticas o acciones gubernamentales relativas a las contribuciones de seguridad social, devolución de impuestos, tasas de interés, cotización del dólar, aranceles y crecimiento desigual de salarios (...) que han "influido en la profundización de la crisis.
Cibils dijo que los planteos que hicieron los industriales son "los mismos" que se han hecho en la mesa textil desde febrero.
"Nosotros hicimos este planteo (el de descolgarse de los ajustes de salarios) para ser coherentes con los reclamos que ya le hemos hecho" al Poder Ejecutivo, indicó Cibils.
El presidente de AITU reiteró que la crisis llevó a un "agravamiento" de la coyuntura complicada que ya venía atravesando el sector.
"Lo último que tenemos del gobierno es que en la primera quincena de julio se iban a dar medidas para el sector de tejido, pero aún no hemos recibido ninguna notificación", reclamó el empresario.
Cibils agregó que "a nadie la gusta sacrificar por el lado del salario, pero que resulta incongruente aceptar un aumento de salario que fue votado en contra en noviembre" cuando se aprobó el convenio de ajuste de los empleados textiles.
No obstante, el presidente de AITU dijo que su gremial está dispuesta a rever su "posición" sobre el descuelgue de los Consejos de Salarios si el Poder Ejecutivo "aplica" una serie de paliativos que puedan ayudar a mejorar la competitividad del sector.
TRABAJADORES. El integrante del Secretariado Ejecutivo del Pit-Cnt, Milton Castellano -que ayer acompañó al Congreso Obrero Textil (COT) en la reunión en la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra)- dijo a El País que la industria textil viene acarreando problemas de competitividad desde hace mucho tiempo "que se mezclan" con los efectos de la crisis.
Según lo acordado en la Dinatra ayer, se estableció un cuarto intermedio de diez días para buscar compromisos globales que permitan mantener los puestos de trabajo y los salarios.
"La idea es tener algún contacto con el Gabinete Productivo para plantear las dificultades que tiene la industria y si se pueden encontrar medidas que ayuden al sector", dijo el dirigente sindical.
El integrante del Pit-Cnt señaló que hay que ver si se pueden "encarar" las dificultades desde un punto de vista "global" y que "no es una solución pedir el descuelgue de la pauta salarial para no dar el ajuste de julio". "Si no dar el aumento de julio haría que no se siga enviando más personal al seguro de paro y que se puedan tomar a los trabajadores que hoy no están trabajando, estaríamos de acuerdo, pero esa no es la realidad del sector", sostuvo.
El sindicalista destacó que no se trata de un ajuste "tremendo" sino que apenas llega al 4% y que esto para la industria no representa mucho en sus costos porque la incidencia de los salarios es "muy baja".
Por otro lado, Castellano anunció que se espera que hoy el gobierno fije una fecha para la reunión tripartida del Gabinete Productivo que podría ser la próxima semana.
La Cámara de Industrias había declarado que insistirá con medidas de tipo "global" que atiendan a todos los sectores para evitar que más ramas de actividad sigan cayendo por los efectos de la crisis.
Ventas al exterior caen 31%
Las exportaciones de lana, hilados y tejidos en el último año móvil cerrado a junio cayeron 31,4%, según datos del Instituto Uruguay XXI. Junto con las pieles y cueros que disminuyeron un 39,9%, los textiles son uno de los sectores más afectados en el comercio internacional. La crisis global frenó las exportaciones de estos productos a México y Estados Unidos que eran los principales destinos. Los industriales textiles locales también hacen hincapié en que la caída de los pedidos en los mercados internacionales se ha visto agravada por los subsidios a la producción industrial que han impulsado países como China y Portugal.
El País Digital
03/07/2009
| Fecha |
03/Jul/2009 |